Lanzarote
Isla de volcanes
Hay un tema que es omnipresente en la Isla de Lanzarote, y esto en el sentido más puro de la palabra: El volcanismo. Numerosos conos volcánicos cubren la superficie de Lanzarote, la que mide unos 850 kilómetros cuadrados. Más de una cuarta parte de la isla está cubierta por lava.
Parque Nacional Timanfaya...
Solo las erupciones de los siglos 18 y 19, que formaron las Montañas del Fuego en el sur de la isla, ocupan una área de unos 200 kilómetros cuadrados. Tanto respecto al período de la actividad volcánica (6 años de duración desde 1730 hasta 1736), como a la cantidad del material expulsado (¡unos 3-5 kilómetros cúbicos!), este fenómeno ha sido único en el mundo hasta la fecha. Las Montañas del Fuego hoy en día forman la sede del Parque Nacional, al que de verdad vale la pena visitar durante la estancia en Lanzarote.
... y mucho más
Además, Lanzarote tiene aún más que ofrecer: Los Jameos del Agua, una instalación arquitectonica construida en un tunel de lava, por el artista y arquitecto César Manrique († 1992); la Cueva de los Verdes, otra porción de la misma cueva, donde también se puede entrar; el Guinate Tropical Park; el llamado Archipiélago Chinijo con sus pequeñas islas vecinas Alegranza, Montaña Clara, Roque del Oeste así como el Roque del Este, y, no menos importante, la bonita Isla de La Graciosa, que sin duda vale la pena de explorar durante una excursión de un día. Pero los destinos mencionados solo son un par de atracciones y lugares interesantes para los visitantes de Lanzarote.
Lejos de los lugares turísticos
Para muchos amantes de Lanzarote, el montañoso norte es la parte más hermosa de la isla. Hay numerosos valles por descubrir, como el Valle de las Mil Palmeras envuelto en un vestido verde y de flores en primavera, con su pequeña capital, Haría, que esta situada allí de manera pintoresca, y que todavía ha podido mantener su carácter original lanzaroteño. Las playas naturales en la costa del extremo noreste de la isla, y por último pero no menos importante, Charco del Palo, con su playa naturista idílica y tranquila.